Albino Lobo, alcalde dimisionario de Lantadilla. / MERCHE DE LA FUENTE
Albino Lobo tira la toalla. Después de
cuatro años como alcalde de Lantadilla en el pasado mandato con mayoría
absoluta y casi otro año más en el actual tras las elecciones
municipales de mayo del 2007, en que no logró la mayoría suficiente
para gobernar en solitario, el ya ex alcalde presentó ayer oficialmente
la dimisión en un pleno que se celebró. Lobo, que se presentó por
Candidatura Independiente, explica que abandona el cargo, aunque
seguirá como concejal, «porque ahora aporto poco como alcalde, y menos
en minoría política».
-¿Qué le ha impulsado a presentar la dimisión?
-Los alcaldes estamos para hacer cosas. No vale estar por estar en
el Ayuntamiento. Me voy porque no puedo gobernar la corporación en
minoría política. Y además, a los alcaldes independientes nos tratan
mal en las instituciones -Junta y Diputación-, pese a que en los
pueblos pequeños dependemos de ellas en más del 60%.
-¿Hay algún motivo específico por el que deja la Alcaldía?
-El pasado año nos quedamos sin obras de los Planes Provinciales de
la Diputación, aunque solicitamos ayudas para cubrir el frontón y no
hubo forma de conseguir apoyo. La carretera entre Frómista y Lantadilla
vuelve a presentar graves deterioros, a pesar de que nos hemos quejado
y solicitado reiteradamente su arreglo. El puente, que necesita
mejoras, exhibe desde diciembre un cartel en el que se anuncian obras,
pero desconozco cuándo llegarán.
-Se rumorea que abandona el cargo porque los otros dos grupos
municipales -PP y PSOE- han vetado la indemnización de 300 euros que
percibía por la Alcaldía...
-No necesito ese dinero para vivir, porque tengo mi trabajo.
Considero que un alcalde debería tener una pequeña remuneración por las
obligaciones que acumula. No dimito por el dinero, sino porque en la
situación del Ayuntamiento aporto poco como alcalde.
-¿Cómo explicará su decisión a los vecinos que le votaron en las elecciones de mayo?
-Con el argumento de que es hora de que se unan el PP y el PSOE,
porque en lo que va de este mandato han consensuado todos los acuerdos.
Que hagan un esfuerzo y se unan, porque cuando se quiere tanto a
Lantadilla, como dicen, es lo lógico.
-¿Y qué hará su grupo, Candidatura Independiente, que fue la lista más votada en las elecciones municipales?
-Nosotros vamos a pasar a ser oposición constructiva, y digo
nosotros porque yo seguiré como concejal en el Ayuntamiento y
facilitaré la gobernabilidad del pueblo, pero nuestro grupo no desea
responsabilidades de gobierno. Los otros dos concejales de CI -Ignacio
Maestro y Ángel Demetrio Lantada- tampoco quieren la Alcaldía.
-¿Cómo queda entonces el Ayuntamiento de Lantadilla tras su dimisión?
-El teniente de alcalde ejercerá como alcalde en funciones hasta la
elección de un nuevo regidor, dentro de diez días. Para ello se
convocará un pleno extraordinario con una votación para elegir alcalde,
en la que ya anuncio que los concejales de Candidatura Independiente
nos vamos a abstener.
-¿Le da pena dejar la Alcaldía?
-Lo único que siento es un gran alivio, y mi familia está más contenta que unas castañuelas.
-¿El Ayuntamiento de Lantadilla es conflictivo a la hora de dirigirlo?
-Es un pueblo como todos, pero es cierto que cuando se es alcalde
se crean enemistades. Yo siempre he trabajado con ilusión y lo seguiré
haciendo como concejal. He estado 21 años en tareas municipales en el
Ayuntamiento, de los que cinco he sido alcalde.